Desafíos y oportunidades en la adopción de la inteligencia artificial en MIPYMES
La inteligencia artificial (IA) está entrando en una nueva etapa de desarrollo, marcando un avance notable en sus capacidades. Sin embargo, a pesar de estos progresos, la confianza en esta tecnología continúa siendo baja tanto entre las personas como en las empresas. Este escepticismo se mantiene a pesar de la evolución hacia herramientas más autónomas y sofisticadas, como la «IA agéntica», que permite que los sistemas ejecuten tareas y se corrijan con poca intervención humana.
Falta de confianza generalizada
Más de la mitad de los encuestados a nivel global expresa reticencia a confiar en la IA, citando preocupaciones sobre seguridad, impacto social y protección de datos. En contraste, en Argentina, el 44% de los encuestados percibe que los beneficios de la IA superan los riesgos, cifra que supera el promedio internacional. Esta discrepancia refleja un panorama complejo donde, a pesar del uso creciente, la confianza sigue siendo un factor crítico.
Uso creciente, pero con limitaciones
A medida que la IA se integra en la vida cotidiana, dos de cada tres personas usan IA de forma regular; sin embargo, el 61% no posee formación específica. Esto se traduce en que muchos usuarios admiten tener conocimientos limitados. En el ámbito laboral, tres de cada cinco empleados utilizan herramientas de IA, aunque a menudo de manera inadecuada o poco transparente. Esta falta de familiaridad puede generar errores y una dependencia poco saludable de la tecnología.
Demanda de regulación
La regulación se convierte en un tema candente, ya que siete de cada diez personas consideran necesaria una regulación más estricta de la IA. Además, el 87% exige normas que frenen la desinformación que puede derivar del uso inadecuado de esta tecnología. Esta necesidad de regulación es un llamado a las empresas y a los responsables de políticas para crear un marco que garantice un uso seguro y responsable de la IA.
Desafíos para las empresas
Las organizaciones tienden a invertir en IA solo si perciben beneficios rápidos y concretos. Avanzar sin casos de uso claros y escalables se considera un alto riesgo de fracaso. La falta de confianza y la lentitud para demostrar resultados económicos tangibles son mencionados como los principales retos para la expansión de la IA en el ámbito empresarial.
IA agéntica: un nuevo horizonte
El surgimiento de la IA agéntica plantea tanto nuevos desafíos como oportunidades para la adopción empresarial. Estos agentes autónomos son capaces de tomar decisiones y actuar con mayor independencia, y su integración en las empresas podría transformar significativamente la forma en que operan.
Contexto y perspectivas
A pesar de los avances técnicos, la adopción masiva de la IA sigue limitada por barreras culturales, regulatorias y de percepción. Las empresas se enfrentan al reto de integrar estas tecnologías de manera responsable, asegurando transparencia y un retorno claro sobre la inversión. Al mismo tiempo, la sociedad demanda un mayor control y explicabilidad en el uso de la IA.
Reflexión final
En economías emergentes como Argentina, la tecnología se ve como una herramienta de diferenciación y supervivencia. Sin embargo, la confianza en la IA aún es frágil y depende de la demostración de beneficios concretos y de una gobernanza robusta. En conclusión, la IA está en una fase de maduración, pero la confianza, clave para su adopción masiva, sigue siendo el principal desafío a superar en los próximos años.